Teniendo en mente el Ultra Bandolero de finales de mes, del que daré buena cuenta en sucesivos posts, y pese a que todavía me notaba cansado de la semana pasada, decidí volver a recorrer el GR-300, esta vez corriendo y de buena tarde.
Me faltaba por conocer el tramo desde el Poblado del Atazar hasta el pueblo del Atazar, ya que cuándo lo hice en bici elegí la variante BTT. Y la verdad es que es mucho más disfrutón que la monótona pista elegida para la bici.
Asímismo confimó lo que ya sabía.
El sendero puede dividirse en 2 partes claramente diferenciadas.
Saliendo de El Berrueco y en sentido antihorario hacia Patones, Poblado y pueblo de El Atazar, esta parte es mucho más técnica, bonita, dura y divertida.
Conformada por senderos en su mayoría y dónde ganamos/perdemos la mayoría del desnivel que se acumula en el total de la ruta.
Desde el Atazar comienza otra parte completamente distinta.
La pista será la protagonista al paso por Robledillo de la Jara, la Presa El Villar (la única zona agreste de este segundo tramo), El Hospitalillo y vuelta a El Berrueco.
En esta segunda parte puede correrse sin ningún tipo de dificultad, siempre y cuándo haya piernas y ganas, y el desnivel es mínimo. Evidentemente el paisaje también cambia, aunque el último tramo hasta El Berrueco, paralelo al Embalse, es una gozada para la vista.
Además dichas partes coinciden en kilometraje. En torno a 25kms. para cada una de ellas.
Al acabar, el consabido premio a tamaña gesta en forma de donuts de chocolate y coca-cola y posterior visita a Navalafuente para recoger de manos de la bandolera mayor un obsequio pendiente (gracias de nuevo....), y de paso conocer al famoso Tito y compartir unas cervezas con la pareja antes de volver al hogar.
Un placer.
Saludos.
DavidP.
Ole!!! ya tenemos Pacheco por los montes!!!
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