Pues ya tenía ganas, sí.
Hacía casi dos meses que no pisaba terreno montañoso y que mejor lugar para volver a hacerlo que la famosa Pedriza.
Además la climatología fué benigna con nosotros y nos permitió gozar de un día otoñal como pocos, que según nos alejábamos de Manzanares nos confirmó la suerte que habíamos tenido.
Acompañado en esta ocasión de los Sres. Escudero y Escribano, sobre las 11 de la mañana partíamos de la barrera dirección Yelmo para bajar luego hacia el Collado de la Dehesilla, subir al Collado Cabrón y vuelta para abajo.
La subida al Collado Cabrón tuvo que ser abortada por una sobrecarga en el gemelo del Sr. Escribano que le impidió disfrutar del día como es debido.
A la altura del Tolmo, y ante la imposibilidad de seguir corriendo, decidimos que seguiría andando hasta el aparcamiento de Canto Cochino mientras nosotros iríamos a por los coches y volveríamos a recogerle.
Pese a comenzar el día con una persistente lluvia, al llegar a Manzanares, el sol fué el protagonista. Esto ayudo a mitigar el viento que soplaba con algo de fuerza en la zona del Yelmo.
Parafraseando al gran Pablo Vega, día gozativo 100% que habrá que repetir antes de acabar el año, como muy tarde.
Saludos.
DavidP.
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